“Puentes” es un álbum con ciertas reminiscencias de folk, guaracha, boleros y pop sentimental que Fabricio Robles construyó a partir de la guitarra, el piano y de su memoria emotiva. Entre lo acústico y lo secuencial, conjuga el recuerdo de lo que escuchaba con su abuela y al mismo tiempo la reparación histórica que Natalia Lafourcade hizo en Musas (2017).

Las seis canciones exploran diferentes formas de vincularse con el otre. Sobre la base de métricas japonesas (haikus y tankas, principalmente) y la tutela de Darío Jalfin, cada una nació de manera orgánica y cuenta con sus respectivo featuring: “Quiero ser” (con Valen Bonetto), “Blanco” (con Karina Alexandra), “Pacífico” (con Naiah), “Agua” (con Elisa Tokeshi), “No sé” (con Paula Prieto, Iara Chiaro & Clari Tiscornia), “Déjame caer” (con Tesania).

“Nunca lo había hecho, pero como las letras hablaban de relaciones interpersonales, me pareció interesante la idea de compartir la interpretación con alguien más”, cuenta el músico peruano con base en la Argentina y agrega que, en medio del “contexto crítico” que atraviesa su país, el disco lo relaciona literal y conceptualmente con Lima. “Ante la frustración y la imposibilidad de estar allá, es un medio, un puente, para sentirse un poco más conectado con las personas”.

Fabricio Robles es un cantautor peruano de pop latinoamericano y folk, con su primer disco publicado en 2015. Robles se aventuró en el mundo del lo-fi pop hasta que se mudó a Buenos Aires a estudiar música. Ahí se enamoró de la música latinoamericana y seguió produciendo música de manera casera, incorporando los conocimientos de estudiar música en Argentina pero manteniendo la esencia pop sentimental que siempre definió su música. Armó varias bandas hasta tener las formaciones con las que cuenta en Buenos Aires y en Lima con las que pudo tocar durante el 2019. Actualmente acaba de lanzar "Blanco" y "No Sé" sus nuevos singles,los cuales dan puntapie a una serie de nuevas canciones que el artista ira mostrando durante lo que resta del 2020.